ESPEREMOS QUE SE HAGA JUSTICIA , BASTA YA DE VIOLENCIA.
22-08-2011 - Ángel Calleja - Fotografías: Daniel Nuevo (CC)/MDO
Una decena de agentes. El día 18 de agosto, alrededor de las 23.00, transitaban por la calle Atocha después de haber intervenido en unaconcentración contra la "violencia policial" en Sol. En un momento dado, según aparece en el vídeo difundido por Internet, cinco de ellos rodean a una pareja. Uno abofetea a la chica. El fotógrafo 'freelance' Daniel Nuevo, que recoge el momento con su cámara, relata pocas horas más tarde haber recibido una paliza por parte de los uniformados después de que su flash delate su presencia.
La secuencia completa, grabada por el también fotógrafo Carlos González Ximénez, es una de las más difundidas en las redes sociales en la última semana y acumula más 660.000 reproducciones en YouTube. También es la gota que ha colmado el vaso para que el Ministerio del Interior, después de que el Gobierno haya negado por activa y por pasiva que los antidisturbios se excediesen en sus funciones, haya decidido abrir una investigación interna para depurar posibles responsabilidades.
Unas pesquisas que, según han informado a Madridiario fuentes cercanas a la investigación, ya ha dado sus primeros frutos. Al menos tres de los agentes que intervienen en la acción ya han sido identificados inequívocamente gracias a la fotografía que el propio Daniel Nuevo recogió y que aparece en numerosas páginas por toda la Red. Lo mismo ocurre con otra docena de agentes cuyas caras aparecen retratadas con toda claridad en las distintas cargas del último mes, según han indicado estas mismas fuentes. Oficialmente, sin embargo, la Policía se remite al secreto de la investigación.
La foto de Daniel Nuevo, que ha confirmado que interpuso una denuncia el pasado viernes en los juzgados de Plaza de Castilla, y el resto de las imágenes recopiladas forman parte de la información reservada que la Unidad de Intervención Policial (más conocida como antidisturbios) ha abierto para depurar posibles responsabilidades por las cargas policiales de los últimos días en Madrid. Los investigadores, según aseguraron los portavoces de la Jefatura Superior de Policía de Madrid a la agencia Efe, incorporarán esta y otras evidencias, incluidos los vídeos que circulan por la red, a sus pesquisas. Tomando como base las mismas, se podrá llamar a declarar a los implicados para conocer su versión de los hechos. De ahí se podría derivar la apertura de un expediente que la Unidad de Régimen Disciplinario cerraría con una sanción si lo estimara oportuno.
Polémica entre sindicatos y políticos
La supuesta agresión a Daniel Nuevo no ha sido la primera ni la única de la que se está hablando en los últimos días. Desde que arrancaron las movilizaciones del 15-M, en el momento en el que se blindó la Puerta del Sol y en las posteriores movilizaciones en el kilómetro 0, ante el Ministerio del Interior otras la marcha laica se han sucedido por decenas las quejas ciudadanas sobre los supuestos excesos de este cuerpo. Todas ellas aluden a un uso de la fuerza que califican como "excesivo" o "innecesario" por parte de algunos de sus miembros. Al menos seis periodistas han asegurado ser víctimas de las mismas prácticas. El primero de ellos fue Gorka Ramos, que denunció haber sido golpeado y retenido en los calabozos de la comisaría de Moratalaz durante más de 10 horas pese a identificarse como redactor de lainformacion.com.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP), la Unión Federal de Policía (UFP) y la Confederación Española de Policía (CEP) han reconocido que, a tenor de lo visto, algunos agentes podrían haber cometido abusos. Ahora bien, exigen que, al mismo tiempo, se depuren responsabilidades políticas en las figuras del ministro de Interior, Antonio Camacho, y de la delegada del Gobierno en Madrid, Dolores Carrión.
Los sindicatos advierten que los agentes están trabajando "sin protocolos de actuación adecuados". Antes ya habían denunciado la "permisividad" de los dirigentes mientras la acampada del 15-M permanecía en el centro de Madrid y el "malestar" que ello provocaba en los agentes.
Para la Unión Federal de Policía, sin embargo, "nunca" ha habido violencia policial. Según su secretario general en Madrid, Alfredo Perdiguero, han sido los agentes los que han sufrido insultos e improperios mientras estaban sometidos a largas jornadas de trabajo, todas las que la policía ha permanecido en la calle mientras se sucedían las protestas de "indignados, laicos, antipapa, antisistema…, molestos, en una palabra". En esta investigación, la central se posiciona de parte de los agentes señalando que la "contundencia" de sus actuaciones es el resultado de "haberse contenido" mientras los políticos "han permitido que se vulneren varias leyes".
Unas pesquisas que, según han informado a Madridiario fuentes cercanas a la investigación, ya ha dado sus primeros frutos. Al menos tres de los agentes que intervienen en la acción ya han sido identificados inequívocamente gracias a la fotografía que el propio Daniel Nuevo recogió y que aparece en numerosas páginas por toda la Red. Lo mismo ocurre con otra docena de agentes cuyas caras aparecen retratadas con toda claridad en las distintas cargas del último mes, según han indicado estas mismas fuentes. Oficialmente, sin embargo, la Policía se remite al secreto de la investigación.
La foto de Daniel Nuevo, que ha confirmado que interpuso una denuncia el pasado viernes en los juzgados de Plaza de Castilla, y el resto de las imágenes recopiladas forman parte de la información reservada que la Unidad de Intervención Policial (más conocida como antidisturbios) ha abierto para depurar posibles responsabilidades por las cargas policiales de los últimos días en Madrid. Los investigadores, según aseguraron los portavoces de la Jefatura Superior de Policía de Madrid a la agencia Efe, incorporarán esta y otras evidencias, incluidos los vídeos que circulan por la red, a sus pesquisas. Tomando como base las mismas, se podrá llamar a declarar a los implicados para conocer su versión de los hechos. De ahí se podría derivar la apertura de un expediente que la Unidad de Régimen Disciplinario cerraría con una sanción si lo estimara oportuno.Polémica entre sindicatos y políticos
La supuesta agresión a Daniel Nuevo no ha sido la primera ni la única de la que se está hablando en los últimos días. Desde que arrancaron las movilizaciones del 15-M, en el momento en el que se blindó la Puerta del Sol y en las posteriores movilizaciones en el kilómetro 0, ante el Ministerio del Interior otras la marcha laica se han sucedido por decenas las quejas ciudadanas sobre los supuestos excesos de este cuerpo. Todas ellas aluden a un uso de la fuerza que califican como "excesivo" o "innecesario" por parte de algunos de sus miembros. Al menos seis periodistas han asegurado ser víctimas de las mismas prácticas. El primero de ellos fue Gorka Ramos, que denunció haber sido golpeado y retenido en los calabozos de la comisaría de Moratalaz durante más de 10 horas pese a identificarse como redactor de lainformacion.com.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP), la Unión Federal de Policía (UFP) y la Confederación Española de Policía (CEP) han reconocido que, a tenor de lo visto, algunos agentes podrían haber cometido abusos. Ahora bien, exigen que, al mismo tiempo, se depuren responsabilidades políticas en las figuras del ministro de Interior, Antonio Camacho, y de la delegada del Gobierno en Madrid, Dolores Carrión.
Los sindicatos advierten que los agentes están trabajando "sin protocolos de actuación adecuados". Antes ya habían denunciado la "permisividad" de los dirigentes mientras la acampada del 15-M permanecía en el centro de Madrid y el "malestar" que ello provocaba en los agentes.
Para la Unión Federal de Policía, sin embargo, "nunca" ha habido violencia policial. Según su secretario general en Madrid, Alfredo Perdiguero, han sido los agentes los que han sufrido insultos e improperios mientras estaban sometidos a largas jornadas de trabajo, todas las que la policía ha permanecido en la calle mientras se sucedían las protestas de "indignados, laicos, antipapa, antisistema…, molestos, en una palabra". En esta investigación, la central se posiciona de parte de los agentes señalando que la "contundencia" de sus actuaciones es el resultado de "haberse contenido" mientras los políticos "han permitido que se vulneren varias leyes".
fuente:aquí
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