Estaba viendo un curioso documental sobre OVNIs (por pasar el rato…) cuando aparece un tipo que habia sido abduccido por unos seres rubios “angelicales” en su nave… el tipo en cuestión comentaba que en una ocasión mientras conducía, un OVNI, se aproximó a su vehículo y el automóvil se detuvo, el sujeto en cuestión, se baja del coche y puede apreciar a dos figuras aparentemente humanas que le hacen señales para que se acerque, pero en un momento dado de la entrevista dice…
… Ví un objeto que era el mismo, posado en el suelo, y que alli fuera de el ya… aterrizado cuando yo llegue, habia dos figuras humanoideas, curiosas, un poco luminosas raras, y que se dirigieran a mi, entonces yo, bueno, hay, un fenómeno de contacto, los expertos dicen un contacto de tercero o cuarta fase y… estupendo ¿no?, fue curioso pues aquel objeto, era, una vez pasabas a su área, era como… da la sensación de que entras hay, era mas grande dentro que de fuera, o sea las dimensiones cambiaban totalmente, aquello era un espacio abierto increíble, no se… no entendía todo aquello, además que cuando ya tropieza con el fenómeno, supongo ¿no?, se disloca de una forma tan directa todo lo que es el intelecto, un poco perdido por hay, por que estas perdiendo una información totalmente fuera de esquemas…
Pero… ahora usted seguramente se estará preguntando…¿y…?; continuemos con la idea…
hace tiempo tuve la ocasión de adquirir un libro titulado “ENCUENTRO EN LAS PLEYADES” , escrito por dos curiosos tipos Preston B. Nichols y Peter Moon, dos norteamericanos que trabajaron para los servicios de inteligencia de los EE.UU. , uno de ellos como ingeniero electrónico (especialista en Electrónica Analógica) y otro de ellos como “Contactado”.
En dicho libro, el Sr. Preston, explica como los Norteamericanos le solían pedir curiosos aparatos generadores de múltiples ondas cuya fabricación requería grandes conocimientos de su especialidad, en la cual el era (y de hecho es) un gran experto.
Pero centrémonos… en una parte del libro dice lo siguiente…
….Durante la mayor parte de la década de los setenta estuve trabajando para un importante contratista de defensa de Long Island. Fue en 1974 y 1975 cuando mi jefe me dijo que había sido seleccionado para formar parte de un grupo especial que analizaría cierta tecnología extranjera localizada en una base no especificada de las Fuerzas Aéreas estadounidenses. Supuse que lo que íbamos a examinar era algún tipo de tecnología rusa o china y comente que me encantaría unirme al grupo. Entonces simplemente me dijo que la tarea no era voluntaria tenia que ir.
Fuimos seis los que subimos al avión que despego del aeropuerto Republic Field de Long Island. Volamos durante un rato y despues aterrizamos. Mirando desde el aire, calcule que nos dirigíamos a Ohio. Así que tocamos suelo y antes de que pudiéramos desembarcar, el piloto avanzo por la pista e inmediatamente entro en un hangar. Entonces nos llevaron directamente del avión a la parte trasera de una furgoneta sin ventanas. Después de viajar durante dos o tres horas, no teníamos ni idea de donde podíamos estar. Finalmente la furgoneta se detuvo y se abrieron las puertas traseras. Salimos a algún tipo de hangar subterráneo que se encontraba totalmente vacío. No había viento ni ningún tipo de característica que pudiera describir el lugar, solo puertas que se abrían y cerraban. Desde una apertura se podía ver un pasillo. Nos llevaron por ese pasillo hasta un control de seguridad, donde nos dieron una charla informativa sobre el tema.
Ya he mencionado que en total formábamos un grupo de seis personas. Uno de ellos era mi jefe, pero ni el ni ninguno de los demás recuerda gran cosa de lo que paso. La charla corrió a cargo de unos empleados de las Fuerzas Aéreas, fácilmente reconocibles por sus uniformes. Mi jefe entablo algunos diálogos bastante extensos con ellos. Finalmente, después de ser informados sobre varios factores de seguridad, nos llevaron a otro hangar, donde vimos un OVNI con forma de disco.
Yo mire a uno de los empleados de las Fuerzas Aéreas y le dije: ¡Eh!, eso es un OVNI.»
El piloto dijo: «A callar. Se supone que no debemos decir cosas como esta. Es un aparato extranjero.»
Entonces nos dijo que nos encontrábamos en el Grupo de Tecnología Aérea Extranjera. Por supuesto se trataba de una muy sagaz utilización del lenguaje. A continuación los empleados de las Fuerzas Aéreas que representaban al Grupo de Tecnología Aérea Extranjera procedieron a ofrecernos una visita guiada del OVNI.
Desde fuera, el aparato era plateado y tenia el aspecto del típico platillo volante en forma de disco. Parecía tener unos 15 metros de diámetro y 6 metros de alto. También tenia una cúpula de quizás unos 4,5 metros de ancho. Toda la nave descansaba sobre tres patas que salían de la parte inferior. Había una rampa que ascendía desde el suelo hasta una puerta situada en el borde del artefacto.
El aspecto mas sorprendente de este platillo volante se hizo patente cuando subí a bordo. Por dentro era absolutamente enorme. La nave solo media unos 15 metros de diámetro, y sin embargo caminamos en una dirección durante lo que me parecieron unos diez minutos. El espacio era de literalmente cientos o miles de pies. En aquel momento no lo supe explicar. Con los conocimientos que ahora poseo, esta claro que penetramos en una realidad artificial cuando entramos en la nave. Este es un aspecto clave para la construcción de un OVNI y su capacidad de viajar de un lugar a otro. Mas adelante hablare sobre ello.
Aunque he dicho que caminábamos por una realidad artificial, era algo tan real como la habitación en la que usted esta sentado ahora mismo. El siguiente punto de interés que observe es que no se podía ver ningún tipo de control. Ni botones, ni palancas, ni mandos. Mientras caminábamos por el pasillo de compartimento en compartimento, las luces se encendían justo antes de que entráramos. Mire hacia atrás y ví que las luces se apagaban cuando nosotros salíamos de una zona. La iluminación estaba muy bien controlada. Mientras seguíamos inspeccionando el aparato, uno de los empleados de las Fuerzas Aéreas nos informo de que el platillo originalmente había tenido una atmósfera extraña, pero que había sido «retroequipado» para que esta fuera compatible con los seres humanos.
Finalmente llegamos a un compartimento que. identificamos como la sala de control. La parte mas destacada de esta zona eran tres butacas colocadas en la parte frontal. Cuando digo butacas quiero decir exactamente eso. Estaban diseñadas para poder reclinarse cómodamente. En la parte trasera había un conjunto de asientos mas pequeños. Nuestro grupo fue informado entonces de que las butacas contenían todo tipo de bobinas, cables y otros objetos. Resultaba evidente que cuando una persona o entidad se encontrara reclinada en la butaca, esta podría captar los pensamientos directamente de su mente. Los lectores de The Montauk Project: Experiments in Time observaran que esta tecnología resulta increíblemente similar a la de la asi llamada Silla de Montauk.
En las paredes, frente a las butacas, había cuatro pantallas de observación. Estas estaban también conectadas con los procesos mentales del operador. Sentado en la silla, uno podía solicitar ver diferentes mapas, cartas estelares o fotografías del exterior del aparato. Solo con pensarlo, uno podía observar lo que había fuera del aparato, en cualquier dirección.
Detrás de las pantallas de observación había otra pequeña sala que contenía una gran cantidad de cristales de roca. Estos, conectados en varios puntos por cables, estaban rodeados por unas bobinas en espiral. Las paredes de esta sala no eran mas que pantallas de observación. No existían ventanas, ni aquí ni en ningún otro lugar del aparato.
Entonces nos subieron a un nivel superior al del área de control. Aquí se encontraban las habitaciones de la tripulación. Además de las instalaciones habituales, este nivel contenía laboratorios y una amplia instalación medica. Los laboratorios contenían mesas de gran tamaño, posiblemente para la experimentación con seres humanos.
Bajo la sala de control, en la parte inferior del platillo, había una habitación enorme llena de diferentes agrupaciones de cristales, todos interconectados por cables…
Supongo que después de haber leído esto… usted se empezará a imaginar de que hablo… pues comparemos estos datos con los aportados por los ummitas… cuando hablan de sus naves… ellos (Los Ummitas) dicen que cuando efectúan largos viajes, recurren a una especie de “realidad artificial” aparentemente mas simple que la mostrada por el Sr. Preston.
no obstante el Sr. Preston afirma:
… Para mi esta claro, por lo que he podido experimentar personalmente, que el OVNI de WrightPatterson era la forma mas avanzada disponible y podríamos considerarlo como el Cadillac de los platillos volantes. La única cosa mas avanzada seria un vehiculo puramente espiritual. Profundizare en los aspectos técnicos de este vanguardista platillo volante, pero antes relatare mi siguiente encuentro personal con un OVNI….
¿Curiosidad?, ¿Casualidad?, ¿Fraude?… usted decide…
Acaso los Ovnis están dotados con sistemas de Realidad virtual con los que simulan realidades penetrando en la mente y los sentidos hasta tal punto que no podemos distinguir la realidad de la ficción,
Estos sistemas de RV son los que impiden que los sujetos sometidos a hipnosis regresivas después de sufrir una abducción puedan recordar lo sucedido, debido, quizás a la disociación de la realidad. Su mente se esfuerza en recordar algo que no ha sucedido…
J.L.Camachohttp://mundodesconocido.com/WordPress/?p=19
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